lunes, 8 de noviembre de 2010

Vivir de recuerdos...NO!


Una fotografía de nosotros. Ahora veo lo que éramos cuando estábamos juntos. Dos personas que se amaban como nadie en este mundo pudiese comprender, o al menos así está grabado en mi cabeza. Quizá desperdicie mi tiempo una vez más encarcelándote en mis recuerdos, pero la verdad esta noche tengo ganas de ser masoquista y permitir que mis recuerdos junto a ti lastimen muy fuerte nuevamente, no los cambiaría por nada de mundo, y aunque sé que no volverás a mi vida, posees un sitio muy especial en mi corazón y que me hace recordarte con cariño.

Quisiera gritarte que vuelvas a mi lado, sin embargo mi orgullo y yo ya no lo permitimos, nos has cambiado nada, tampoco lo harás. Y seremos buenos amigos, cuando te vea evitare que susurres en mi oreja, te diré que la vida debe de continuar, como debe de ser, tú con tu vida, y yo intentando conseguirme una propia, pero quiero una vida real y no inventada, de esas ya sobran demasiadas en mi cabeza. Te voy a extrañar cuando este lejos, supongo que es naturaleza humana. Tendrás otros amores que me alejaran de tu memoria, yo te mantengo vivo en mis recuerdos y ahí estas muy seguro.

Ahora todo está muy claro para mí. Me acuesto por las noches totalmente cansado, rendido y agobiado por la presión del día a día. Si así es, mi amante en mis brazos y permito que me abrace, sé que cuando despierte por la mañana él no estará más a mi lado.

Aunque he guardado muy bien la fotografía, esta ahí seguirá escondida entre mis cosas viejas, y cuando la encuentre por casualidad, se convertirá de nuevo en una fábrica de viejos momentos que aun se encuentran intactos en ella, el tiempo se detendrá para que yo los aprecie nuevamente. Sé muy bien que lo que tengo ahora en mi presente no es tan perfecto o no es como lo he soñado, pero es mi realidad y prefiero eso antes que vivir aferrado de recuerdos pasados. Así todo está en si sitio.

Hay días que me gusta gastar el tiempo imaginando historias, en las cuales yo soy el personaje principal, el que sonríe mientras obtiene el tan ansiado final feliz, pero la vida no garantiza finales felices y trato de controlarme, aunque el riesgo de lanzarme a vivir esos sueños ahora se ven muy distantes, prefiero dejarlos morir con cada pedazo de realidad que pasa frente a mis ojos, sobre mi cabeza la luz me hace recordar que hoy tengo mucho tiempo más para soñar y me quedo en ese rinconcito de mi habitación, puedes encontrarme en la frontera de la locura, no te diré como llegar. Solo espero que tengas un poco de tiempo para mí.

2 comentarios:

  1. Llevaba tiempo detrás de ello. No me ponía por dejadez, por aquello del "bueno, en otro momento...". Una tarde los cogí. Uno a uno fui abriendo sus páginas, saqué todas sus fotografías y las tiré. Luego tiré los álbunes también a la basura. Los recuerdos, en el interior.

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  2. yo creo que esa es algo que funciona muy bien, yo lo he hecho y es una forma de desprenderse magnifica!!!

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