domingo, 28 de noviembre de 2010

Dándole forma

Cuando comencé hace un par de meses a introducirme en el mundo de la blogosfera y me decidí a crear mi propio blog, fue un gran reto para mí, ya que sabía muy poco sobre la creación, diseño, publicaciones en el blog.

Pero después de muchos tutoriales, búsquedas ayuda por internet, visitando otros blogs especializados, poco a poco comencé a darle forma al Diario Secreto de Dorian Gay y me gusta mucho la forma que tiene el blog aunque con el tiempo seguirá cambiando y adquiriendo nuevas formas y colores. Transformándose.

Y la sorpresa? Pues los premios. Que era algo que desconocía totalmente, la verdad me hacen mucha ilusión. Creo que pronto me darán uno que se llame “tu blog me da depresión” porque últimamente escribo cosas muy tristes, y es que la tristeza es mi principal musa inspiradora, solo cuando me siento así comienzan a salir muchas ideas para escribir.

Otra cosa que me gusta mucho es la cantidad de personas con blogs tan diversos, tan coloridos, toda una gama para leer y perderse un buen rato del mundo en que vivimos. Saludos.

sábado, 20 de noviembre de 2010

Agonía

El joven se encuentra muy lastimado, sus lágrimas fluyen a través de numerosas heridas aun abiertas. Cansado de caminar en el túnel donde nada cambia, donde se muere la inocencia día a día. Atrapado sin consuelo. Se quiere morir pero no es tan valiente o no lo suficientemente cobarde para hacer que eso suceda por sus propios medios, la tierra tiembla y se asusta. Si abandona este mundo la vida seguirá para todos, solo que ya sin él.

Túnel oscuro, frio y sin vida, lleno de miedos y fantasmas, sin sueños. Se quiere morir y a nadie le importa. Se muere a cada segundo y nadie le importa. Vientos que secan sus lágrimas y que apagan su llama. Su risa ya no alumbra el horizonte, su rostro ya no refleja apariencia alguna cuando mira al espejo. Atrapado y sin ganas de encontrar la salida. Ya no la podrás encontrar. Perderás la vida una noche. Se congela tu alma.

La alegría ya no es posible. Morirás. Tu dolor dejará de ser constante. Olvidará los ocasos y su pasado flotará rumbo al camino olvidado y los ángeles desnudos ya no cuidaran más del alma. Su corazón sufrió los engaños constantes de los sueños y descubrió que la vida puede hacerle daño fácilmente y el alma evaporarse fácilmente en un suspiro.

Joven que sabe mucho del amor, del sufrimiento, de penas y crepúsculos en brazos prohibidos, corazones fracturados. Joven que se le marchitaron los sueños, como se marchitan las flores del jardín o del cementerio, colección de condenas grandes. La carne envejecida, sin movimiento condenada por engaños del tiempo. La niebla vigila constantemente el descanso. Bajo la piel las venas se van quedando sin sangre, y sus labios ahora están perdidos junto a su mirada. Quiere morir como el tiempo, la espera termina y se condena, se culpa y se rinde.

viernes, 12 de noviembre de 2010

Las mujeres que amaban a las mujeres

Había una vez un planeta en donde las mujeres amaban a las mujeres, el amor podía verse en sus rostros, y sus almas siempre puras jamás lloraron ni conocieron el dolor...

Por que perdonar no era tan difícil ni imposible y la suciedad no era sociedad…. Por favor mi amor hazme creer, ciérrame la boca y dime que existes le susurraba ella al oído de su amada que se encontraba extasiada y con su cuerpo desnudo.

El universo apartó de sus vidas todas las dudas y miedos que fueron acumulando en el pasado, pero ahora estaban juntas una de la otra. Y podían tocarse sin pudor ni temor, sus besos no eran prohibidos, ni las caricias se daban a escondidas.

Sus infinitos juegos bajos las sabanas estaban llenos de lujuria y el cielo bajaba cada noche hasta la habitación y explotaba junto a las mujeres que amaban a las mujeres.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

El gato que ríe de último, se muere.


Nueve de los diez gatos de mi casa estaban tristes pues tenían hambre, ya que días atrás se habían comido todos los ratones que había en la casa. Sin embargo uno de los diez gatos no podía parar de reír. Las carcajadas salían de su boca como si fueran una fuente o un manantial abundante e inagotable. Los 9 gatos tristes pensaron que este se estaba burlando de ellos y comenzaron a apagar sus risas con miradas hirientes, palabras perversas, espaldas afiladas y garras enloquecidas.

Mi amigo y yo


Somos tan diferentes, pero al mismo tiempo somos muy unidos, por las noches nos llamamos para contarnos nuestras penas y glorias del día. Aunque él se pasa lamentando su virginidad esperando al amor de sus sueños, un día mi amigo se convirtió en una piedra, aunque camina, siente, pero no ama, y si bien me da miedo que me convierta en una piedra también, sigo siendo su amigo.

El reloj que no daba la hora.


¡Se ha detenido el tiempo! grité al ver que no avanzaban las manecillas del reloj que colgaba sobre mi techo. y lejos de preocuparme, me alegré y salí a ver al mundo aprovechando que se había detenido mientras yo avanzaba a través de él, mi colección de corazones rotos ahora estaban reparados y no eran tan pesados como antes, el viento ya no soplaba en mi rostro. Quería viajar entre las nubes, desnudo y sin miedos, pues el tiempo se ha detenido y mi viaje imposible recién acababa de comenzar.

lunes, 8 de noviembre de 2010

Vivir de recuerdos...NO!


Una fotografía de nosotros. Ahora veo lo que éramos cuando estábamos juntos. Dos personas que se amaban como nadie en este mundo pudiese comprender, o al menos así está grabado en mi cabeza. Quizá desperdicie mi tiempo una vez más encarcelándote en mis recuerdos, pero la verdad esta noche tengo ganas de ser masoquista y permitir que mis recuerdos junto a ti lastimen muy fuerte nuevamente, no los cambiaría por nada de mundo, y aunque sé que no volverás a mi vida, posees un sitio muy especial en mi corazón y que me hace recordarte con cariño.

Quisiera gritarte que vuelvas a mi lado, sin embargo mi orgullo y yo ya no lo permitimos, nos has cambiado nada, tampoco lo harás. Y seremos buenos amigos, cuando te vea evitare que susurres en mi oreja, te diré que la vida debe de continuar, como debe de ser, tú con tu vida, y yo intentando conseguirme una propia, pero quiero una vida real y no inventada, de esas ya sobran demasiadas en mi cabeza. Te voy a extrañar cuando este lejos, supongo que es naturaleza humana. Tendrás otros amores que me alejaran de tu memoria, yo te mantengo vivo en mis recuerdos y ahí estas muy seguro.

Ahora todo está muy claro para mí. Me acuesto por las noches totalmente cansado, rendido y agobiado por la presión del día a día. Si así es, mi amante en mis brazos y permito que me abrace, sé que cuando despierte por la mañana él no estará más a mi lado.

Aunque he guardado muy bien la fotografía, esta ahí seguirá escondida entre mis cosas viejas, y cuando la encuentre por casualidad, se convertirá de nuevo en una fábrica de viejos momentos que aun se encuentran intactos en ella, el tiempo se detendrá para que yo los aprecie nuevamente. Sé muy bien que lo que tengo ahora en mi presente no es tan perfecto o no es como lo he soñado, pero es mi realidad y prefiero eso antes que vivir aferrado de recuerdos pasados. Así todo está en si sitio.

Hay días que me gusta gastar el tiempo imaginando historias, en las cuales yo soy el personaje principal, el que sonríe mientras obtiene el tan ansiado final feliz, pero la vida no garantiza finales felices y trato de controlarme, aunque el riesgo de lanzarme a vivir esos sueños ahora se ven muy distantes, prefiero dejarlos morir con cada pedazo de realidad que pasa frente a mis ojos, sobre mi cabeza la luz me hace recordar que hoy tengo mucho tiempo más para soñar y me quedo en ese rinconcito de mi habitación, puedes encontrarme en la frontera de la locura, no te diré como llegar. Solo espero que tengas un poco de tiempo para mí.

domingo, 7 de noviembre de 2010

Cuestión de tiempo.

Cuando tus noches sean insoportables y solitarias, no te acompañaré.

Cuando tus esperanzas se derrumben, no limpiare tus lágrimas.

Cuando tu cuerpo se encuentre débil, me ilusionaré.

Cuando en tu viaje envejezcas, sentiré pena por ti.

Cuando en último suspiro digas mi nombre, no lo escucharé.

Cuando la vida poco a poco te abandone, sonreiré.

Cuando tú mueras, a tu lado me encontraré.

Senderos


Los senderos ya no eran luminosos, pero yo aun seguía avanzando entre los extraños caminos, muchos pararon su caminar cuando la eterna noche cayó en nuestras vidas sin previo aviso, todo se fue obscurecido, y la vida comenzó a desaparecer, yo corrí, tuve miedo y lloré.

Cierto tiempo de caminar mis piernas ya estaban temerosas de seguir su camino, mis lagrimas iban dejando su rastro a lo largo del camino por si yo decidía volver algún día, aunque no recordaba que apenas tocan el suelo estas se desaparecen, ¿y su rastro? Ya no hay rastro, ya no hay vuelta atrás.

Me prometiste que todo estaría mejor, me prometiste amor eterno, pero hoy siento que me apago para siempre entre promesas no cumplidas y restos de corazones rotos. Quizás no deba creer más en tus mentiras porque de nada me ha servido serte fiel y horrarte. Arrodillarme a tus pies, sacrificar mi bienestar con tal de tenerte a mi lado. Tu sonrisa ya comienza a sonar distante en mi cabeza, no sé si son recuerdos que he inventado o sueños que he tenido.

Me hubiese quedado en el camino con los demás, pero siempre me ha gustado estar solo cuando estoy melancólico y aunque sé muy bien que los senderos ya no son luminosos, la energía suprema me guía en mi caminar y ya no temo a la soledad ni a los fantasmas de los recuerdos pasados, mi desnudez no me avergüenza y mi mente ya libre de ideales y utopías insanas. Mi vida había sido tan falsa como debido a tantas mentiras que fui coleccionando en mi cabeza a través de los años que estuve a tu lado y que tu alimentaste con bellos susurros en mi oído.

No sé cuánto tiempo más durara mi caminar, no sé si caminare eternamente solo, como un convicto, quizá deba abandonar el camino y regresar a tu lado y cobijarme con tu sombra y tus mentiras.
Los senderos ya no eran luminosos, pero yo aun seguía avanzando entre los extraños caminos, muchos pararon su caminar cuando la eterna noche cayó en nuestras vidas sin previo aviso, todo se fue obscurecido, y la vida comenzó a desaparecer, yo corrí, tuve miedo y lloré.

Cierto tiempo de caminar mis piernas ya estaban temerosas de seguir su camino, mis lagrimas iban dejando su rastro a lo largo del camino por si yo decidía volver algún día, aunque no recordaba que apenas tocan el suelo estas se desaparecen, ¿y su rastro? Ya no hay rastro, ya no hay vuelta atrás.

Me prometiste que todo estaría mejor, me prometiste amor eterno, pero hoy siento que me apago para siempre entre promesas no cumplidas y restos de corazones rotos. Quizás no deba creer más en tus mentiras porque de nada me ha servido serte fiel y horrarte. Arrodillarme a tus pies, sacrificar mi bienestar con tal de tenerte a mi lado. Tu sonrisa ya comienza a sonar distante en mi cabeza, no sé si son recuerdos que he inventado o sueños que he tenido.

Me hubiese quedado en el camino con los demás, pero siempre me ha gustado estar solo cuando estoy melancólico y aunque sé muy bien que los senderos ya no son luminosos, la energía suprema me guía en mi caminar y ya no temo a la soledad ni a los fantasmas de los recuerdos pasados, mi desnudez no me avergüenza y mi mente ya libre de ideales y utopías insanas. Mi vida había sido tan falsa como debido a tantas mentiras que fui coleccionando en mi cabeza a través de los años que estuve a tu lado y que tu alimentaste con bellos susurros en mi oído.

No sé cuánto tiempo más durara mi caminar, no sé si caminare eternamente solo, como un convicto, quizá deba abandonar el camino y regresar a tu lado y cobijarme con tu sombra y tus mentiras.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Querido diario 23/09-2009

me encontraba en mi habitación preparándome para dormir...
cuando me ha caído una llamada del chico nuevo (para mi).
este chico la verdad me gusta bastante y llevo las cosas poco a poco, ya que me gustaría que fuera mi novio en un futuro cercano.

y como la experiencia me ha enseñado a ser un poco más precabido he decidido ir conociendo poco a poco, analizando muy bien sus gustos, su comportamiento cuando está o no conmigo. para asi luego no llevarme sorpresas inesperadas.

bueno volviendo al tema...me ha llamado para desearme buenas noches...si la verdad es un poco cursi...pero me gusta eso :D . . .
Se muy bien que quizá no puedo controlar mis sentimientos pero quiero evitar enamorarme prematuramente de él

jueves, 16 de septiembre de 2010

El pecado de Dorian


Aquella tarde en la iglesia las mojas rezaban el santo rosario a la virgen de turno, al otro extremo frente al Cristo crucificado yo descubría bajo aquella sotana sagrada un nuevo paraíso desconocido, el santo padre con su rostro sonriente me daba una copa de vino, yo me la tomaba de un trago, arrugaba mi rostro y cerraba los ojos, los abría, el santo padre me abrazaba besaba mi frente y ponía sus manos en mis hombros y hacia que me agachara mientras él se quedaba de pie, yo abría la boca y tomaba el elixir divino que el santo padre ponía frente a mi rostro, el me explicaba que hacia esto para bendecir mi cuerpo, mi alma y mente.

La virgen María sonreía desde su retrato pintado colgado en la pared aprobando mis acciones y diciéndome que con su voz suave y serena que me dejara llevar al reino de los cielos. Los rayos del sol entraban por la ventana y dejaban ver mi cuerpo andrógino que recibía sus primeras caricias celestiales, ya acostado boca abajo, el santo padre ahora desnudo se montaba sobre mi frágil cuerpo y expulsaba los demonios con la serpiente que entraba con movimientos bruscos hasta que el agua vendita era derramada en el interior de mi ser, la serpiente salía y yo cerraba los ojos, me mordía la boca, aguantaba el dolor y limpiaba mis lagrimas.

Luego el santo padre juntaba mis manos y me daba la bendición, cerraba mis ojos y sonreía por que había experimentado como Dios entraba en mi cuerpo y su esencia ahora me acompañaba en mis entrañas y me protegerían del mal y del pecado. Ya era salvo y Dios me recibiría en el reino de los cielos por que había hecho su santa voluntad.

El santo padre limpiaba la sangre de Cristo que había quedado en mi cuerpo, me bañaba, me secaba, me vestía y me abrazaba. Luego cambiaría las sabanas, yo me iba para mi casa con una sonrisa en el rostro y una duda en mi corazón. Mi cuerpo quedaba adolorido por varios días ya que el espíritu santo es muy fuerte y mis pecados eran muchos.

Me guardaba el secreto por recomendación del santo padre, que deseaba más que nada mi salvación, mi pureza y preservar mi inocencia. El domingo en la misa matutina yo ponía mucha atención a las palabras del santo padre me daba nuevamente el cuerpo y la sangre de Cristo esta vez junto a mis padres, me guiñaba el ojo, me sonreía mientras yo decía Amen.

Querido Diario

Mis Padres… Mis Miedos…y Yo


Querido diario recuerdo cuando mis padres y yo éramos tan felices… ellos me abrazaban, me contaban un cuento antes de dormir, jugábamos los domingos por la tarde en el parque, íbamos a comer, me decían cuanto me amaban mientras me hacían cientos de cosquillas en la panza y yo reía tanto hasta llorar, pero supongo que algo pasó que no debía pasar, algo que ellos no esperaban en el plan de vida que tenia para mi…ese algo que yo tampoco pude ignorar a medida que fui creciendo.
hoy por la tarde me puse a recordar aquella época en la que tenía apenas 13 años de vida, cuando estaba a punto de conocer el mundo a través de la experiencia…(si, esa misma que nos hace bajarnos de la nube, la que no hace que enfrentemos a la vida mientras explota, cada vez que puede, la frágil burbuja en la cual vivimos, todo para recordarnos que la vida no es perfecta)…ese día al llegar a mi casa, corrí a esconderme a mi habitación, al cerrar la puerta lagrimas comenzaron a salir de mis ojos como si estuviese dispuesto a inundar toda la casa. Confundido, defraudado, solitario y diferente me sentía mientras cubría mi rostro con mis manos, tratando de contener el llanto pero un nudo en la garganta me vencía y de nuevo me entregaba al dolor, sabía que tenía que aceptar esa realidad aunque tuviera todo el universo en mi contra y es que era tan inminente/real/ como que el sol existe, las nubes y el viento que acaricia mi rostro o podía hacerme el desentendido y comenzar a vivir una mentira por el resto de mi vida con tal de acomodarme a la vida perfecta que mis padres tenían pensado para mí para que encajara perfectamente en la sociedad.

Y es que cuando eres Gay y vives en una sociedad un poco cerrada/tradicional/ nadie quiere aceptar esa realidad y miran hacia otro lado, tus padres esperan que les digas que quieres ser doctor, abogado, ingeniero o cualquier otras cosa, pero lo que ellos no se esperan que les digas “mamá, papá soy gay” y la sonrisa de sus rostros se apague por completo.

Pero yo sigo siendo tu hijo, ayúdame, entiéndeme, aconséjame, acéptame pero no trates de cambiar lo que la naturaleza bellamente ha creado. Mi madre llorando me dijo que tenía un “mal espíritu” metido en mi cuerpo que hacía que me confundiera y que me apartaba del camino del bien…me mandó para una iglesia de esas extrañas que hacen tanta algarabía tratando de sacarme el demonio que tenia metido, mi padre por otro lado se hiso el desentendido y dejó de preguntarme si tenía novia, si me iba a casar, dejó de soñar con los nietos jugando en el jardín de la casa, dejó de abrazarme y hacerme cosquillas.

Recuerdo como mis padres estaban tan orgullo de mi, era su hijo perfecto, no daba problemas, sacaba las mejores calificaciones de mi grado, y cuando se las enseñaba lo bien que me había ido en el instituto/colegio él me decía “hijo mío que orgullo me haces sentirme” …”cuando te gradúes te voy a regalar un carro para que vayas a la universidad” …”me siento tan feliz”… yo lo abrazaba era inmensamente feliz y sentía que cada día debía ser el mejor hijo que ellos pudieran pedirle a la vida …pero hoy un par de años después esas palabras han quedado en el olvido, en mis recuerdos, sigo siendo el hijo que no da problemas y que saca las mejores calificaciones, pero no ha vuelto a decirme lo orgullosos que se sienten de mí, me dan ganas de abrazarlos y decirles que sigo siendo su hijo, el mismo que no ha dejado de hacer todo lo posible para que ellos sigan sintiéndose orgulloso de mi, que ser gay no me hace ser peor o mejor persona, ni diferente, ni un monstruo, solo tengo una preferencia sexual distinta.

Amo infinitamente a mis padres, ellos que han sido siempre mi principal apoyo en la vida y que me han inculcado sus valores y principios mismos que aun conservo, me han dado todo lo que les he pedido y nunca lo he defraudado, sólo que de vez en cuando me gustaría que ellos dejaran de darme cosas y me abrazaran fuertemente y me preguntaran sobre mis sueños, sobre mis metas, que me pregunten cuando les presentaré a mi novio, el hombre de mi vida que está por llegar a mi vida, sobre mis miedos, mis angustias, mis sentimientos.

Hay días que a media noche salgo a fumar (como lo hacia mi padre) mientras miro los estrellas me pongo a pensar sobre mi vida, sobre mi futuro mis planes y metas, he dejado de correr a encerrarme a llorar a mi habitación y esconder mis lágrimas en la almohada, pero aun no puedo evitar esconderme de mis miedos, frustraciones y fantasmas que tratan de someterme e impedirme ser feliz. Pero siempre estoy tratando de encontrar la forma de vencerlos/enfrentarlos, sé que eso sucederá a medida que vaya creciendo y mejorando mi persona cuando las experiencias de la vida me enseñen a través sus extrañas lecciones de aprendizaje. Únicamente espero no morir en el intento.

Querido Diario

Sexo en los baños


Seguramente para muchos este es un tema muy común y nada nuevo, y es que los baños públicos se han convertido en un lugar en el cual se puede encontrar sexo de manera rápida, sin compromisos y sobre todo de manera anónima, pero una pregunta que se me viene a la mente… ¿es realmente una práctica segura? A continuación les hablo un poco desde mi perspectiva experiencia, mi punto de vista únicamente.
Recuerdo una mañana de abril en la cual me dirigí a un centro comercial a tomar un café con unos amigos, antes decidí pasar por el baño antes de reunirme con ellos, inocentemente, a hacer mis necesidades urinarias, de repente me llamó mucho la atención que mi compañero del lado me miraba de manera insistente incitando o insinuando con su mirada mostrándome su verga erecta, al comienzo me sentí un poco incomodo ya que no estaba muy acostumbrado a eso, sentía que alguien podía entrar en ese momento y arrestarme o sacarme de aquel lugar, casualmente en esa ocasión nada de eso ocurrió, me quede mirándole el miembro y este hombre comenzó a masturbarme con sus manos fuertes y grandes, el tipo pues no se miraba tan mal, era pasable para mis gustos, después de un rato yo comencé a masturbarlo también y ya luego de un rato pues acabamos, yo me limpie me lavé las manos y Salí de ese lugar casi corriendo y con unos nervios terribles ni siquiera le pregunte el nombre ni intercambiamos números de teléfono, mi mente que le fascina crear historias alternas, pensaba, ¿y si alguien nos estaba mirando?, o quizá había cámaras de vigilancia y todo había quedada grabado, y así seguí por un buen rato durante me tomaba el café, que era mi motivo original por el cual yo me encontraba en ese lugar.
Y esa fue mi primera experiencia sexual de ese tipo, pero algo en mi había cambiado, cada vez que entraba a un baño público siempre tenía presente aquel episodio de aquella mañana quizá esperando que se repitiera, solo que no tenía la valor debido a los innumerables peligros que ello implica.
Y al pasar de los días y meses casi siempre miraba las mismas personas metidos en los baños, el extranjero con cara de “quiero sexo” un pequeño hombrecillo muy extraño por cierto, también había un hombre gordo que siempre me enseñaba las llaves del carro, otro hombre con cara de enojado pero que siempre me enseñaba su enorme pero grotesco miembro invitándome a tocarlo, oh se me olvidaba un día uno de ellos salió detrás de mí y se puso a caminar junto a mi lado, era bien alto y delgado recuerdo que tenía un aspecto cansado y parecía estar enfermo , me quería llevar a un motelito del centro, proposición que yo no acepte, luego me dijo que si no quería ir muy lejos podíamos ir a unos matorrales que habían detrás del centro comercial, rápidamente mi mente comenzó a recrear mentalmente esa propuesta yo metido en un matorral teniendo sexo con ese extraño y la verdad que no pude evitar reírme cuando escuche eso y le dije que se alejara de mi, el hombre se molestó un poco y sin perder mucho el tiempo volvió a meterse a los baños.

Ese día Salí de ahí un poco asustado pero asombrado al ver como muchos de los chavos y señores que se llevan ahí metidos tienen sexo ahí mismo, o en los carros, me parece que no es una práctica muy segura, para empezar es gente extraña que conoce gente extraña, o mucho se van a otros lugares a tener sexo, pero nadie me quita de la cabeza que mas de alguno puede ser un asesino homofóbico enserie que no le importa para nada degollarte y dejarte tirado en la tina/yacusi/baño de algún hotel barato.
Hablando con mis amigos sobre este tema, ellos me comentan que mas de alguna ocasión ellos también han caído en una situación de esas ya sea por la tentación, inexperiencia, falta de conocimiento o simplemente por qué quieres tener sexo, y me dicen que en otros baños públicos de otros puntos de la cuidad la situación es igual o peor y me contaron la historia de que un hombre fingió ser gay y luego asaltó al amigo de mi amigo, otros me cuentan que muchos de los hombres que ahí se llevan no les gusta protegerse mientras tienen sexo, y claro que no todas las historias han de ser cuentos de horror, habrá quien lo disfrute, se proteja y nada pase.

Querido Diario

martes, 17 de agosto de 2010

1 El Momento

Un largo suspiro me acompañó en el mágico momento luego de verte pasando frente a mi ignorándome y borrándome de tu mundo mientras el tiempo congelado en mi mente capturaba el momento y yo egoísta lo guardé solo para mí.
Y quedo marcado en mi cabeza la sonrisa que no me diste y el adiós que callaste, cuando frente a mi pasaste, y ese instante comprendí que lo que nunca comenzó jamás terminaría.
Un sueño nada más

2 El llanto

Luego cantaría eternamente de frente a su ventana mirando hacia la luna, y su madre amigos y conocidos tratarán de hacerlo dormir antes que la media noche lo encuentre solo triste y vencido, él ignorara los ignorará unas vez más cantando más fuerte, pero él está descansando bajo la tierra y desde ahí ya no escuchará su amargo llanto.

3 El descanso

Desperté precipitadamente en estado inmóvil acostado sobre mi espalda y vestido para la ocasión, con mi único saco de sastre y corbata negra a rayas blancas, con las manos sobre el pecho en posición de descanso, mis zapatillas más brillantes que nunca que combinaban a la perfección con el traje de sastre, el olor de cientos de flores e incienso perturbaba mi descanso, mis uñas tan pálidas como mi rostro y mis ojos aun cerrados escuchaba atento y galante los susurros y ruidos que a mi llegaban pero enmudecido y no de la sorpresa.

Encerrado en mi caja de fríos pero alegres adornos con paredes blancas y acolchonadas escuchaba atento los interminables cuchicheos de la gente que se encontraba en aquel grande salón, con aire bastante pesado aliviado únicamente por las ráfagas de viento que entrababan a través de las numerosas puertas y ventanas y estas también se llevaban los llantos y suspiros a punto de expirar en el olvido de la noche, aunque los ramos de flores eran muy bellos y numerosos parecía que estos no podían atenuar la tristeza de todos los ahí presentes.

Un señor estaba adherido a un negro bigote y una gran nariz sobresalía de su rostro, su notable estatura estaba en plena armonía con su grueso aspecto, con unos anteojos llamativos de esos que llevan las personas mayores y con una voz muy fuerte daba un profundo discurso… y así se le pasaban las horas hablando sobre la vida, la muerte, el olvido, el perdón, los miedos, las tristezas nuestras acciones buenas y malas y otros temas de los cuales yo nunca había profundizado. Mientras todos escuchaban atentos una señora triste repartía café a las personas que escuchaban atentos, el discurso parecía que los había puesto más sensibles y las lágrimas brotaban de los ojos de algunos, la señora triste que repartía café para soportar mejor la fría noche, estaba cansada y de vez en cuando se llevaba una mano a la cara y lloraba desconsolada deseando que aquello no fue cierto mientras con la otra sostenía la bandeja del café caliente.

Pasado el discurso las damas tristes de negro con blancos cabellos comenzaron a entonar a una misma voz rosarios y oraciones extrañas una y otra vez en coro, dentro de poco las flores se marchitarían las tirarían a la basura. Todos lloran. Todos están tristes…excepto yo. Quisiera por un momento levantarme, correr, reír, perdonar y jugar de nuevo, supongo que por ahora eso es más que imposible de lograr a menos que sea a través de recuerdos sueños e ilusiones.

Extrañamente ya no tenía deseos de hacer el amor con mi novio, no quería sentirme amado ni estar enamorado, no quería que el llorara sobre mi…pero con los ojos cerrados me entregué al descanso sabiendo que dentro de poco desaparecería bajo tierra y me convertiría en olvido.

Logrando la meta

Como les conté anteriormente he comenzado un periodo de sequia inducido (no estoy teniendo sexo hasta volver a enamorarme), la verdad es que se me está haciendo muy difícil, ya que la tentación es mucha y la fuerza de voluntad creo que también, pero a pesar de todo me estoy sintiendo bien conmigo mismo.

**************

Lo primero que he hecho es irme directo a la librería a comprarme un buen libro, grande y grueso para entretenerme por las noches.

**************

He estado teniendo bastante vida social, salgo mucho con mis amigos, por las tardes y sobre todo los fines de semana. Ya que son los fines de semana es cuando me gusta tener sexo.

**************

He hecho algo muy peculiar que miré en una serie (the new adventures of old Christine) me he puesto un cinturón de castidad de vello púbico…no me depilado para nada por allá abajo, creo que no podría estar con alguien en el estado en que me encuentro, y la verdad que esto me está funcionando.

**************

He tenido que cambiar momentáneamente mi número de móvil porque así evito llamadas tentadoras de proposiciones indecorosas.

**************

Me estoy enfocando bastante en mis estudios, especialmente en matemáticas. Biología, física, química, bueno en todas y hago mis proyectos y deberes…que buen muchacho me he vuelto.

**************

Y por ultimo me he puesto a hacer un poco de ejercicio, no para que me salgan músculos, si no para quemar un poco de calorías y tener algo de acción…aunque sea de esa forma.

miércoles, 4 de agosto de 2010

Pensando en hacer el amor…

Desde hace un par de meses estoy pasando por un momento de sequia inducido, en tiéndase sequia como la ausencia de sexo por cierto tiempo, y es inducido por que yo mismo he tomado esa decisión, aunque tengo un amigo que lleva un periodo de sequia No-inducido bastante largo, creo que lo que va del año el piensa que alguien le ha hecho alguna brujería o algo así porque últimamente nadie se le acerca, volviendo al tema debo admitir que al comienzo me ha resultado muy difícil, la sola idea dejar de tener sexo cuando este es parte fundamental para comenzar o terminar bien la semana, para desestresarse por tanta presión que nos imponemos en el día a día, en fin me daba una desesperación, ganas de salir corriendo y tener sexo con la primera persona que encontrara en la calle, pero eso se acabo(aparentemente) y puedo escribir con tranquilidad sobre este nuevo proceso/proyecto personal que estoy llevando a cabo.

Creo que han de pensar que me estoy volviendo loco o algo por el estilo, la verdad que yo también lo pienso de vez en cuando pero el motivo por el cual he decidido hacer eso es porque últimamente me estaba enfocando en tener sexo, tener sexo y tener sexo, y eso fue lo que hice durante mucho tiempo, y en algún momento entre tener sexo y tener sexo comencé a descuidar mi corazón, mis sentimientos y toda esa parte emocional y cursi que siempre me ha gustado o en otras palabras “estar enamorado” y como me di cuenta de ello?...pues me encontraba hace algún tiempo atrás cuando minutos después de haber tenido sexo de manera intensa como me gusta que sea y con quien yo sabía perfectamente que podría pasar un buen momento…pero algo ocurriría luego del final del orgasmo… apareció como por arte de magia una terrible sensación de vacío que no había experimentado antes o que posiblemente la había ignorado.

Me fui a dar una ducha quizá tratando de limpiar todo ese cumulo extraño de emociones nuevas/negativas, luego me vestí. Salí de ese lugar y me dirigí a mi casa directamente a mi habitación, experimentando y reflexionando sobre esa sensación que para mí era completamente nueva y acostado ya en mi cama, no sé si hay un límite de personas con las cuales hay que acostarse para tener una sensación de ese tipo, lo cierto es que yo la estaba experimentando y para nada me gustaba tenerla ya que no me dejaba tranquilo e interrumpía mi delicada paz emocional y mental. Pasó la semana y llegué a la conclusión de que esa sensación/sentimiento de vacío se debió a que probablemente ese día ya me encontraba un poco más sensible que de costumbre.

Y así que una semana después, cuando de esa sensación poco quedaba de su rastro, decidí tener sexo nuevamente, de tanto pensar y pensar me había estresado, y que mejor pasar sacar todo ese estrés y tenciones acumuladas me dije a mí mismo. Recuerdo que le pedí a mi chico/amante/pise/hombre/ (menos novio) que esta vez fuéramos más intensos, llegar a una nueva dimensión de placer, como si fuera la última vez que lo haríamos…y así fue. Para mi sorpresa o no, la sensación de vacío no tardo mucho en reaparecer importándole poco todo el placer que yo había sentido milésimas de segundos antes, esta vez me sentí un poco más triste que la vez anterior pero menos sorprendido y un poco más angustiado.

Pensando y pensando llegué a la-no sé si extraña- conclusión de que esa sensación de vacío era la falta de amor durante la relación sexual, ya según mi teoría –recién descubierta para mí pero seguramente tan antigua como el ser humano- necesito hacer el amor y no solamente tener sexo, ya que únicamente estaba satisfaciendo esa necesidad sexual dejando de un lado ese bello sentimiento y sensación de hacer el amor cuando uno está enamorado. Es así que deje de tener sexo y ha comenzado ese tiempo transitorio entre dejar de tener sexo y hacer nuevamente el amor y mientras eso sucede me dedicaré no sé si a buscar el amor ya que dicen que no hay que buscarlo si no que el solo aparece pero estaré muy atento a las señales.

Habitación 518…conociendo al extraño



Jamás he visto tu rostro, no sé cómo eres, pero te imagino, te has descrito en varias ocaciones, solo he escuchado tu voz, muchas han sido las veces que hemos hablado, te conozco sin conocerte, tenemos varios meses de estar en contacto, demasiados diría yo. Pero hoy es el gran día que he venido a conocerte supongo que me he dejado llevar por esa emoción que se siente al correr riesgos… ¿pero que sería la vida sin emociones?, tengo una vaga imagen de ti, espero que seas como te imagino. He llegado puntual al sitio donde hemos decidido realizar nuestro encuentro, Se muchas cosas sobre ti, tu nombre, tu edad, tu profesión, donde vives, pero no conozco tu rostro, eres un ser extraño aun.

La noche está fría, perfecta para mi, creo que el frio es mi mejor amigo, los días nublados opacos y tristes, como hoy, me transportan hacia aquellos días de infancia, cuando era un niño, inocente, que jugaba durante horas y horas sin parar, que lejano me parece todo eso ahora. Pero ahora es distinto, muy distinto, he crecido y con el paso del tiempo he ido matando poco a poco la inocencia que quedaba en mi cuerpo.

Me aproximo sigiloso, con temor y emoción… ya se ha cual habitación a la cual me dirijo, tú me lo has confirmado, habitación 518, antes de entrar al hotel, un fuerte soplo de viento hace que me detenga un poco, a disfrutarlo, quizá trata de seducirme a que reflexione un poco, recapacite y de la vuelta, pero no puedo, ya es la hora, no puedo llegar tarde.

Tú esperas impaciente mi llegada, decido entrar al hotel, nadie me pregunta donde me dirijo, paso por el lobby, la recepcionista parece haberme ignorado con su mirada vacía que finge estar preocupada, igual el guardia de la entrada supongo que estarán cansados de ver entrar y salir personas todo el día, todos los días, mientras que yo entro al elevador, presiono el numero 5, voy solo en el, como si nadie quisiera ser testigo de nuestro gran encuentro, de mi aventura, me ha parecido eterno el tiempo que he pasado en el ascensor,… por fin, camino un poco, estoy fuera de tu habitación, la puerta está abierta, me detengo un momento a pensar si entro o no, lo he decidido, he entrado.

Te encuentras dentro y ahora parado frente a mí, esperándome, tu cara delata la sorpresa al verme, parece que te ha gustado lo que has visto, me recibes con una gran sonrisa, no puedes creer que por fin nos hemos conocido, no has dicho ninguna palabra aun, has enmudecido al verme, creo que estoy confundido, pero tú sigues ahí firme frente a mí. Respondo a tu silencio con una sonrisa, no sé cómo romper el hielo, creo que te voy a decir ¡hola!, no se me ocurre nada más. Tú rostro parece un poco nervioso, yo también, pero lucho increíblemente por no demostrarlo, luego de un largo momento de mutua observación, tú dices que pase y que me ponga cómodo.

Decido sentarme en tu cama, cama que es tuya solo por esta noche, hay un cuadro en la habitación, que me llama la atención es una mujer con una sandilla en su cabeza, un típico cuadro de estos hoteles, dejo de ver la pintura y te veo, eres casi de mi estatura, tu amablemente preguntas si deseo algo, yo te respondo que no, aunque en mi interior se la respuesta, te deseo a ti. Decido salir por el balcón, tienes una bella vista de la ciudad.

Me detengo a ver un poco a ver, lo que posiblemente tu habías visto hace solo unos instantes, grandes edificios, todos iluminados por la luces de la ciudad que comienza a dormir, me pregunto si alguien más está mirando en otros balcones, pero no veo a nadie, este hotel parece estar abandonado, esta noche no hay estrellas, el cielo está nublado. De pronto de nuevo, una gran ráfaga de viento rosa mi rostro, indicándome que es hora de entrar de nuevo en la habitación.

y ahí estas tu, en el mismo lugar, inmóvil, donde te dejé antes de salir, cruzamos un par de palabras, decidimos conocernos un poco más, me relatas un poco de tu viaje, todo ha estado sin novedades, el mío también, hemos hablado tanto antes de conocernos, que parece que no tenemos nada nuevo qué conversar, tú me preguntas que quiero hacer. Yo te respondo con una sonrisa, no sé si es tímida o picara, esperando que comprendas su significado, tengo ganas de ti.

Me parece eterno el tiempo que he estado en esta habitación, con una persona que hace 5 minutos no conocía, pero que ahora conozco, y me ha gustado lo veo, tu cuerpo aun sigue un poco nervioso, creo que es normal en ti. Creo que daré el primer paso. Seguimos platicando, ambos sentados en la cama, nos hemos recostado un poco, de pronto una fuerza dentro de mí me hace acercarme poco a poco a tu rostro al punto de sentir tu respiración, no sé si me arrepentiré después pero te he besado.

Parece que mis labios también te han gustado, has correspondido a mis audaces labios, poco a poco hemos comenzado a besarnos de una forma intensa, apasionadamente, como si nos conociéramos de toda una vida, nos acariciamos y siento el movimiento de tu cuerpo, estamos acostados, abrasándonos, comiéndonos a besos, he decidido a tocar todo tu cuerpo, me gusta todo lo que toco, me gusta tu cuerpo.

Quítate la camisa, quítate la ropa, quiero sentir tu cuerpo desnudo, yo he comenzado a hacer lo mismo con una desesperación empujada por el deseo, no me he dado cuenta, ambos estamos desnudos, en esa cama, en ese hotel, en este universo, nadie existe para nosotros, solo estamos tu y yo, sintiendo nuestro cuerpos desnudos, hemos decido entregarnos el uno al otro, hemos abandonado nuestras ropas, ellas están tiradas en el suelo, nosotros en la cama.

Una gran lujuria nos ha invadido, decido besar todo tu cuerpo, me fascina besarte, y tu parces disfrutarlo, yo te disfruto totalmente, todo tu cuerpo, tu piel, todo. Creo que hemos decido recuperar el tiempo que hemos perdido hablado por teléfono, pero hoy ese estamos juntos tu y yo, amándonos en esta cama, como si nos conociéramos de vidas pasadas, se me olvida que te acabo de conocer, pero eso no me importa, deduzco que a ti tampoco, tal parece que ambos estamos en las nubes, el paraíso está en nuestra habitación, nuestra porque estamos tu y yo, que por el momento somos uno solo.

Siento como la sangre recorre todo mi cuerpo a gran velocidad, mi corazón late demasiado rápido y siento como una energía me ha invadido, a ti te pasa lo mismo, ambos nos movemos, como una danza, nunca hemos bailado juntos, pero creo que ambos estamos sincronizados en nuestro movimientos , damos vueltas interminables por esta cama, parece que la cama ha desaparecido, la habitación también, nada nos importa, continuamos besándonos, continuamos amándonos, si recordar que somos dos extraños, dos extraños que ahora están en esta habitación fusionados en uno solo.

Te has entregado a mí, seguimos moviéndonos y haciendo el amor llevados el por el deseo y derrotados por la pasión en un ritmo sincronizado, nos hemos convertido en uno solo, me gusta esta estar a tu lado, creo que seguiremos así toda la noche, tu parce que quieres lo mismo, me gusta entregarme a ti, mi cuerpo está ardiendo se ha convertido en un volcán a punto de estallar, seguimos y seguimos, siento como disfrutas mi cuerpo, no quiero separarme de ti.

Por favor sigamos, sigamos, se que lo disfrutas, lo sé porque veo tu rostro, tu cuerpo y tu pasión me han embriagado, siento como estoy a punto de estallar, no sé qué hora es, pero en estos momentos es algo que no me importa. La emoción, la pasión, la lujuria terminaron junto al orgasmo, lo he disfrutado

Creo que estamos exhaustos, tal vez necesitamos dormir un poco, creo que la noche está a punto de terminar. Nosotros terminamos por hoy, duerme que tu cuerpo está cansado, el mío también, descansa por que mañana el día será largo, y nuestra pasión habrá regresado.

sábado, 17 de julio de 2010

El Encuentro


Cientos de enormes hojas secas cubrían mi cuerpo cuando una tarde desperté y me encontré tirado en el suelo en medio de una calle polvorienta y de aspecto abandonado, un lugar desconocido, una excesiva humedad en el ambiente perturbaba mi cabeza, sentía que me congelaba la garganta evitando que pronunciara una sola palabra, desconcertado comencé a caminar sin dirección por aquel lugar sombrío, apenas podía ver las siluetas de los árboles que rodeaban el camino por donde andaba, una luna menguante revelaba en el cielo diversas nubes negras e imponentes relámpagos alumbraban mi andar, como si una fuerte tormenta estuviera a punto de caer. Ráfagas interminables de viento golpeaban mí rostro cuando de pronto sentí como si una energía extraña entraba y me recorría entero, se apoderara de mí voluntad y de mis pensamientos, sin darme cuenta quedé inmóvil, seguido por un gran escalofrío que estremeció todo mi cuerpo, esa extraña sensación no era más que un profundo miedo al ver tirado en el suelo el cuerpo de un hombre por lo que observaba había sido golpeado fuertemente, tenia cientos de heridas y casi desnudo con sus ropas rasgadas rodeado por una laguna de sangre fresca que evidenciaban la terrible muerte que había tenido.

Por un instante controlé mis miedos y dirigí la mirada hacia aquel pobre hombre y mientras me acercaba hacia él pensaba… ¿cómo habría venido a parar a este lugar? ¿Cuánto tiempo llevaría ahí tirado? ¿Qué hizo en su vida para merecer un final tan miserable?, tampoco pude evitar reflexionar sobre lo frágil que somos los seres humanos y como de un momento a otro la vida que conocemos y todos los seres a nuestro alrededor se pueden desvanecer para siempre y quedar únicamente en la mente de quien nos ha conocido o lo corta que puede llegar a ser la vida para algunos que no saben apreciarla gastando cada minuto en asuntos banales y sin sentido o bien deciden ponerle fin antes de tiempo agobiados por la terrible vida a la cual han sido condenados por los infortunios de este mundo, sin embargo todo ese cúmulo de pensamientos fueron sacudidos de mi cabeza de una forma precipitada hasta dejarme aturdido frente a lo que mis ojos estaban observando, descubrí horrorizado que aquel hombre ensangrentado y sin vida no era otro más que mi propio cuerpo.

Invadido por el miedo retrocedí lentamente unos cuantos pasos tratando de asimilar lo que estaba presenciando, por un largo momento no pude cerrar mis ojos y estos se pusieron rojos. Mi boca se secó, palabras y gritos ya no pudieron salir de ella. Una gran desesperación me invadió y llevé las manos sobre mi cabeza, bajé la mirada y de rodillas caí vencido. Lágrimas comenzaron a brotar de mis enrojecidos ojos, mi rostro se puso pálido. No sé cuánto tiempo estuve en ese estado, inmóvil sin poder pensar. Las miles de lágrimas derramadas se fueron mezclando con la sangre y en ese momento noté con asombro como ambas comenzaban a fluir sobre las hojas hasta ser absorbidas totalmente por la tierra, yo seguía de rodias, apenas respirando y observando atentamente lo que sucedía a mí alrededor.

Un gran silencio y una aparente calma invadieron aquel solitario lugar en el cual el universo y sus infinitas fuerzas naturales decidieron traerme esta noche, las ráfagas de viento aun balanceaban fuertemente a los arboles y las hojas iban de un lado hacia otro y golpeaban mi cuerpo, pero por alguna extraña razón yo no escuchaba absolutamente nada, ni el ruido de una rama cayendo de un árbol, ni el sonido de mis propias pisadas en el suelo. Sabía que nada tenía sentido en ese sitio, como pude comencé a alejarme apresurando el paso cada vez más y sin mirar hacia atrás en ningún momento.

Luego de caminar perdido por varias horas, en medio del bosque una destellante luz blanca comenzó a aparecer frente a mí, esta se hizo más fuerte, extrañamente me sentía atraído hacia ella y me llenaba de paz al caminar hacia ella y cuanto más me acercaba el miedo, la angustia y el dolor se desaparecían.

….Y así es como la vida de miles de hermanos homosexuales terminan acecinados y tirados en las calles alrededor del mundo, donde al ser encontrados habrán muchas preguntas y pocas respuestas y simplemente pasan a ser parte de las estadísticas de casos sin resolver…porque a las autoridades policiales al parecer no les interesa resolver crímenes de maricones…

viernes, 16 de julio de 2010

Miedos de un joven gay adolescente…

Hay días que me levanto lavo mis dientes y mientras me preparo para entrar nuevamente a la rutina del día a día y por un momento me detengo y tomando mi desayuno siento miedo absurdo de todo lo que me rodea al estar expuesto a la realidad de la vida, como ser humano que soy creo que es normal tener miedo de vez en cuando, pero cuando eres un joven con problemas de orientación sexual (gay) y tus padres no lo saben (o se hacen los desentendidos), creo tus miedos e inseguridades aumentan mucho mas y esto nos lleva a un terrible mal conocido como depresión.

Recuerdo aun la primera vez que quise suicidarme a la edad de 12 años, y tú has de estar pensando qué razón tendría yo para estar pensando en algo así, pues la verdad hoy muchos años después doy gracias que no lo hice ya que la verdad no valía la pena, y así he dado gracias de no haberlo hecho otro par de veces a medida que fui creciendo, ya que la vida en ocasiones es tan bella que no me atrevo a terminar con ella, creo que cuando estamos sumergido en nuestros miedos e inseguridades perdemos totalmente nuestra capacidad de razonar bien las cosas y nos dejamos llevar por nuestras emociones del momento, algo que siempre he hecho es tratar de no encerrarme en mi mundo, distraerme, no pensar mucho en el problema, se perfectamente que al día siguiente me sentiré un poco mejor aunque quizá los miedos ahí sigan esperando un nuevo momento para atacarme .

Pero pro no es del suicido que quiero hablar en esta ocasión… hay un miedo que siempre está ahí latente en mi vida, el miedo a la soledad, temo despertar un día convertido en un viejo regordete con mi belleza envejecida y arrugada, ya quedándome calvo, con miles de historias trágicas de desamor por contar, con el corazón cansado de tantas ilusiones y desilusiones todo lo anterior no sería tan malo si no estuviera terriblemente solo en una casa hermosa donde al llegar únicamente me reciban un par de perritos peludos que me harán compañía durante la noche mientras fumo una pipa y tomo una copa de vino tinto mientras parado frente a la ventana pensaría como vine a convertirme en lo que siempre odie.

Lo anterior es el escenario de mis mas espantosas pesadillas, hay días que me pongo a pensar que es lo que pasa con el amor gay, ya que son pocas las parejas que conozco solidas y que lleven una vida plena y felices, que hayan compartido toda su vida juntos enfrentado todos los altibajos de la vida juntos como un matrimonio real.se que han de existir el mundo es grande y hay miles y miles de historias de parejas gay que han envejecido juntos y se aman como el primer día que se conocieron pero para serles franco en mi caso personal no conozco ninguna pareja así como la he mencionado y lo único que esa situación hace es alimentar ese miedo de terminar solo y sin pareja…(creo que eso sonó como a una canción de Arjona)

Y entonces me pregunto que estoy haciendo mal, que estamos haciendo mal las personas homosexuales, será que amamos mal, no sabemos amar?¿será que una vida no nos basta para aprender a amar plenamente a una persona?, pero es que tampoco hay un manual que te diga “como ser gay y amar hasta que la muerte os separe” y si lo hubiera no sé si sería muy útil, digo todas las personas somos distintas y amamos a nuestra manera, lo que no se es porque no podemos conservar toda esa pasión todo ese amor que decimos tener cuando comenzamos una relación, con el paso de los meses los días y los años ese amor se va yendo de las manos y no hacemos nada por tratar de que eso no suceda o será que no es suficiente el esfuerzo que hacemos por salvar una relación encaminada al desastre

Con cada relación que termino me atrevo a decir que poco a poco voy perdiendo la capacidad de entregarme nuevamente con la intensidad que lo hice anteriormente y eso es algo que no me gusta, pero el miedo a que me hieran nuevamente o el miedo a que los pedazos en que ha quedado mi corazón se quiebren nuevamente, todo eso me detiene y me susurran al oído “no te entregues, no te enamores” trato increíblemente de ignorarlo o ser muy cauteloso pero al final dentro de mí sé que tengo que arriesgarme enormemente por alcanzar eso que todos buscamos…la felicidad.

Dice por ahí una marca de chocolates (a la cual soy adicto) que la felicidad viene en pequeños trocitos, así que los disfrutaré mientras estos duren. Un saludo hasta donde se encuentren será hasta una nueva historia. Por hoy se despide de ustedes el Señorito Dorian.

Hoy No...


Mientras en mi habitación me eternizaba,

escuchaba la fresca lluvia que no caía,

en tu cuerpo yo no reposaba,

pues ya a mi lado no estabas.

Y ya no volviste...


ya no quise que volvieras,

pues ya a mi lado no estabas,

Y eso ya no me importaba.



Deje de inventarte…pues ya no existías.

Viejos amores que vuelven…

Siempre que terminamos una relación, o en el peor de los casos alguien termina con nosotros, llevamos en nuestra mente ese deseo no verlo nunca más, en mi caso personal trato de borrar todo aquello que me recuerde a esa persona, pero siempre llevo en lo más profundo ese miedo inevitable de verlo de nuevo con otra persona en una nueva relación antes que de que yo inicie una, y enseguida pienso en como su vida ha seguido y parece que ha logrado comenzar una nueva relación, mientras que yo aun llevo esos terribles recuerdos esperando que el tiempo logre borrarlos algún día para poder entregarme de nuevo, todo eso se me viene a la mente cuando quizá la relación acaba de terminar, no acostumbro pensar que algo mejor vendrá, aunque eso casi siempre es así, pero ¿que llega a pasar cuando esos viejos amores vuelven luego de que ha pasado mucho tiempo y más aun cuando tu ya has superado esa herida profunda que te dejó su partida?

Esa fue la pregunta que me hice el otro día cuando por esas extrañas sorpresas que te da el destino y te junta con ese antiguo amor que ya había olvidado por completo, bueno al menos eso pensaba en mi mente inocente, y ahí lo tenia de frente venia caminado y no pude hacer nada por evitarlo, no pude cambiar de rumbo, no pude hacerme “el loco”, no nada pude hacer para evitar enfrentar ese momento que había evadido por tanto tiempo, y que en el fondo lo deseaba pero me hubiera gustado estar preparado, pero pocas veces la vida te da esa ventaja de prepararte para eventos inesperados y catastróficos.

Simulé mi mejor sonrisa, oculte lo más que pude mi cara de sorprendido, y avente mi terrible miedo al jugar más profundo de mente, y una sola palabra salió de mi boca…”hola” después de un rato de conversar con él y luego de asimilar esa terrible sorpresa nos fuimos al lugar donde venden el vicio que aun compartíamos… (Vicios terribles que poco a poco estoy dejando), y ahí nos encontrábamos tomándonos un café y degustando un cigarrillo de esos suaves que por cierto con la excusa que son suaves y hacen menos daño tiendo a fumar un poco más, luego de más de un año de no vernos nos poníamos al tanto de nuestras vidas, de nuestros logros de nuestros nuevos amores y nuevas vidas que habían seguido tras nuestras separación.

Luego de más de una hora del “gran reencuentro” olvidé todo mi nerviosismo/miedos y me deje llevar por la fluidez de la plática y comencé a disfrutar el ya no tan incomodo momento, lo miraba un poco distinto, pero todavía tenía “ese no sé qué” que me enamoré desde la primera vez que lo miré, y claro está los años no pasan en vano y estos ya se comenzaban a reflejar en su rostro,…me preguntaba si su esencia aun seria la misma. Cuando terminó la plática, cada uno volvió a su camino… no sin antes intercambiar nuestros números de teléfono con la excusa de darnos una llamada de vez en cuando…

En el camino pensaba si tenía novio, si ya era feliz con otro persona, si aun me miraba atractivo y quizá me deseaba o si aun me llevaba en su álbum de recuerdos…en fin tantas preguntas quedarían sin respuesta hasta volvernos a ver. Ya por la noche en mi casa un poco más cómodo y ligero de ropa recostado en mi cama comencé de nuevo a navegar por el inmenso mar de recuerdo que aquella platica trajo a mí cabeza, pensaba en todos los bellos momentos que habíamos pasado juntos, las interminables noches que hacíamos el amor hasta quedar exhaustos de placer, el sabor de sus labios venia a mi boca, la sensación de que me abrasaba fuerte mientras nuestras pieles desnudas se fundían en un solo ser…inevitablemente aquella noche entre mis sabanas daba vueltas mientras entre mis piernas grité su nombre seguido de un gran suspiro.

lunes, 12 de julio de 2010

¿Accesorio de decoración?


Recuerdo perfectamente la primera vez que odie mi belleza. Jamás pensé que llegara a decir algo así, se me hace difícil llegar a aceptarlo, ya que muy en el fondo todos sabemos que la belleza física nos facilita mucho la vida, se nos hace más fácil hallar trabajo, encuentras más rápido el amor o si tu lo quieres llevas una vida sexual muy activa por no decir coges a cada rato…esto me recuerda la ves que andaba con un amigo es pues no es muy agraciado que digamos y fallas un poco extravagantes, andábamos en un centro comercial y en una vitrina miramos algo que nos llamó la atención y decidimos entrar a la tienda…entro primero y yo juraba que mi amigo venia atrás de mi, resulta que no lo habían dejado entrar porque “su apariencia no era adecuada” dijo el guardia de la entrada, yo no lo podía creer, en fin nos fuimos de ahí jurando nunca más volver, y hasta el día de hoy lo hemos cumplido. Caminando me fui pensando en lo que había ocurrido y a mis adentros sonreí di gracias por ser bello y tener siempre las puertas abiertas.

Lo que me puso a pesar y pensar, por cierto siempre he dicho que pienso más de lo que hablo, y jamás se me llego a cruzar por la mente que la única razón por la cual muchos de mis amantes están o han estado a mi lado es precisamente por esa razón, porque soy bello, lo cual me resulta un gran insulto a mi inteligencia, ya que toda mi vida me he graduado con honores en todos los niveles de educación por los cuales he pasado y se que así seguiré, ya que siempre me gusta ser el mejor en lo que hago y disfruto haciéndolo, es por eso que soy bien selectivo con las personas que me rodean, desde mi círculo de amigos, que por cierto no es muy grande, hasta mis amantes, siempre me gustan que sean personas exitosas en el sentido de que han logrado algo en sus vidas, personas que tienen metas y sueños, la verdad es que no busco belleza cuando decido conocer a alguien, pero ¿qué es lo que ven ellos en mi?

Y fue cuando me hice esa pregunta que me comencé a preocupar mucho más…y llegué a la conclusión de que la mayoría de personas con las cuales me relaciono (personas que tengo sexo/personas que tengo afecto rosando al amor) todas o la mayoría están con migo porque soy bello?, y si yo fuera feo, será que yo no tendría tanto sexo como lo tengo ahora? o seguramente todo me resultaría un poco más difícil, o seguramente no estaría rodeado de estas personas, estaría rodeado de otro tipo de personas, o quizá simplemente seria uno más de la lista de otra persona bella que me llamaría únicamente cuando le diera la gana tal como yo lo hago?, será que poco a poco me he convertido en un ser horrible por la forma en la cual trato a las personas que me rodean?, no creo, en todo caso los seres horribles y vanidosos son ellos que están conmigo únicamente porque soy lindo/joven dejando por fuera otros aspectos más profundos como que soy culto/educado/cariñoso/benevolente.

Con todo este tema en la cabeza me encontraba el otro día en la casa de uno de los hombres con cual me fascina estar y ahora les cuento porque, pues es el hombre más bello con el que he estado (tiendo a decir eso de todos los hombres bellos), tiene esa pinta extranjera que me fascina, ojos azules, blanco, alto, tiene una maestría y todo eso … por ultimo un factor interesante…tiene mucho dinero lo cual le permite pagar todos los lujos por los cuales se encuentra rodeado, el dinero no es muy importante para mí, pero te da ese tipo de seguridad que solo un hombre rico te puede dar, bueno mientras él se daba una ducha yo me fumaba un cigarrillo recostado en un hermoso y confortable sillón en la sala de estar junto sus bellos perritos que me miraban atentos con si yo les fuera a dar comida o jugar con ellos (los perros no son mis mascotas favoritas), que por cierto uno está algo enfermo, y justo ahí me puse a pensar será posible que para este hombre solo soy un hermoso y exquisito accesorio más que complementa todo su entorno?, ya que todo lo que él tiene es bello, es costoso, obras de arte en la pared, sillones de cuero, un televisor que me atrevo a decir que es más grande que mi, y fue en ese momento que llegué a sentirme un simple accesorio de decoración mas para ese hombre, mientras tanto él salió del baño y miro mi carita triste y me dijo con acento gringo “alguien tan bello no debería estar triste, vamos te llevaré de compras para que tú te sientas mejor”

Pues así de cruda era mi realidad, solo soy un accesorio mas para él, y lo más increíble es que sabiendo todo eso aun seguimos viéndonos, sus lujos me deslumbran pero lo que más me asusta es ese poder que tiene sobre mí, y yo que no hago nada por cambiar las cosas, pero soy joven y hay muchas cosas que aun no he aprendido a cambiar, bueno pensándolo bien quien tiene que madurar soy yo y quizá cambiar el tipo de hombres con los cuales me acuesto, o acaso será que sin darme cuenta ¿me gusta que me traten como un accesorio de decoración?, algo que debo tener en cuenta que todo personas/cosas tienen su momento y cuando algo se pone viejo y feo simplemente te desechan como un adorno que se rompe, creo que comenzaré a cultivar un poco mas mi espíritu y a equilibrar mis energías y pensamientos.

¡La primera vez que me rompieron el corazón!

Aun lo recuerdo, como si fuera ayer, lo más extraño es que fue hace más de un año, bueno hace 22 meses, una semana y tres días…que terrible.

No sé si es porque fue la primera vez que me rompieron el corazón o por que la relación fue más intensa que pensé que he experimentado en mi vida y que nunca el final llegaría…lo acepto, ¡Que iluso soy! Tenía para ese entonces 17 años, en mi plena y bella juventud. Que por cierto yo debería estar pensando para ese entonces estar acostándome con hombres bellos, señores elegantes, que siempre andan buscando carne fresca para devorar. Pero no… ¡yo me enamoré!

Y me enamore tan ciegamente de alguien mayor 10 años que mí. Es una gran casualidad que mi padre también le lleva esa misma edad a mi madre! Y yo decía. “¡Oh los astros quieren que la historia se repita!” Y suspiraba cada noche al abrazar la almohada, luego de escuchar su voz. Oh que voz! Decía a mis adentros!...el amor nos lleva a un extraño estado en donde vemos todo bello, vemos bello a nuestro hombre, borramos totalmente todos sus defectos y los volvemos perfectos a nuestros ojos. Bien dicen que es muy pero muy tentador ver lo que nosotros queremos y no ver la realidad.

No entrare en detalles sobre la relación…ya sabrán a los 17 años y como lo dije anteriormente, todo era bello para mi, sin problemas en el colegio, la relación mis padres estaba de lo mejor, bueno al menos no daban señales de lo contrario, yo tenía el hombre que siempre quise, el que siempre me gusto, al que un par de veces le robé un beso mientras el tenia otro novio. El beso prohibido…bueno fueron varios y en diferentes ocasiones que nos quedábamos solos, ya saben… esas grandes casualidades de la vida y en las uno nada tiene que ver.

Llevábamos cerca de dos años de conocernos, y una tarde junio el destinos nos volvió a unir en un café, donde yo había ido a parar para refrescarme un poco después de un inesperado asalto, la cuidad y sus interminables peligros, y ahí estaba el, sentado, magnifico, bello…y con otro hombre...Tengo que admitirlo, se me borró la sonrisa cuando lo mire acompañado. Fui a saludarlo a su mesa, por cortesía claro, luego compre mi café, y me senté en una mesa cercana a tomar mi café. Luego de un rato su acompañante se fue, y él se dirigió a mi mesa, yo estaba más nervioso que nunca, claro trate en no demostrarlo, para no hacerles el cuento largo se sentó conmigo platicamos y una semana después ya éramos novios, habíamos hecho el amor tres veces y la primera vez que estuvimos juntos, y durante ese tiempo me atrevo a decir que tuve más sexo con él, que con todos los hombres con los que me había acostado en mi vida…les recuerdo que a los 17 años no tenía mucho camino recorrido, pero no era precisamente un novato en los asuntos sexuales.

En lo que si era todo un novato. Virgen e inocente. Y totalmente un terreno a mis experiencias era en el amor. Oh si el amor, nunca en mi vida me había enamorado. Hasta el momento lo único que había hecho era tener sexo, mucho sexo, a veces del bueno, otro ocasiones no tanto. La situación es que una semana después de andar con él. El dijo esa terrible palabra que vino a estremecer mi mundo…mientras hacíamos el amor apasionadamente, susurro en mi oído…”te amo”

En el momento no dije nada ni pensé nada...Ya luego cuando nos fumábamos el típico cigarrillo después de tener sexo…mi mente comenzó a volar a aquel momento en el cual el dijo esas palabras, y un millón de pregunta vinieron a mi cabeza ¿EL me ama enserio?, ¿Qué es el amor?, ¿yo debo decirlo también? ¿Por qué lo dijo? ¿Qué pensará en este momento al ver que yo tampoco no se lo dije? A así hasta que terminé de fumar el cigarro, nos dimos el beso de buenas noches y abrazados sentí trasladarme nuevamente al cielo, como ocurría siempre que me quedaba con él. Claro después de inventar cientos de miles de excusas en mi casa para podes dormir fuera del hogar, como siempre, yo me salía con la mía.

Y así pasaron los días las semanas y los meses, hasta que un día yo también dije esa mágica palabra…”te Amo”…bueno nos sé si es mágica, pero a todos nos gusta escucharla si proviene de esa persona a quien también amamos, aunque a veces da un poco de miedo ya que bien lo dice Santa Shakira “solo la ilusión trae desilusión”.

Recuerdo una tarde después de almorzar juntos y el respectivo café con su cigarrito como digestivo, me fue a dejar a mi casa, nos despedimos con un beso y con una sonrisa se despidió nuevamente de mí, me baje del carro y corrí a mi universo personal como le llamo, pero que todos le llaman un desastre de habitación. Y mientras yo acostado en mi cama pensaba en lo feliz que era, en lo bello y generoso que era el universo conmigo, y decidí llamarlo, para saludarlo y decirle. “te amo mi amorsote bello”…pero sorpresa, el teléfono ya estaba apagado.

Y siguió apagado durante todo el fin de semana, mi mente trataba de encontrar cualquier excusa que justificara ese teléfono apagado y su notable ausencia… ¿Seguramente lo asaltaron?, el teléfono se le arruino cuando seguramente su carro choco con otro distraído conductor, a lo mejor está en el hospital inconsciente o en estado de coma, seguramente me tiene preparada una gran sorpresa, o quiere distanciarse un poco para extrañarme más y cuando nos volvamos a ver va a ser muy intenso y especial,… y así pasaba yo horas y horas haciendo historias triste y trágicas que justificaban la razón por la cual había desparecido, estaba convencido que el lunes iba a llamarme, me levanté temprano me fui al colegio, revisaba el teléfono, no me lo despegaba de la mano, cada vez que ese teléfono vibraba o alguien me llamaba, mi corazón se detenía y se ilusionaba por un instante…seguido por una larga destilación…él nunca llamó. Vino el martes, el miércoles, jueves y viernes…de bueno estaba seguro que el sábado aparecería de su viaje inesperado del trabajo y por esa razón no había podido avisarme que se iba por una semana del país.

Pero el no daba señales de vida, y fue entonces que comencé a preocuparme seriamente, a lo mejor algo terrible le había ocurrido y yo tranquilamente me había sentado a esperar que el me llamara, que actitud tan pasiva dije yo pensando y pensando y ya con un terrible remordimiento que no me dejaba tranquilo. Y entonces hice lo que debía haber hecho hacia una semana...llamé a su mejor amigo, quien tampoco me contesto mi llamada, pero le dejé un correo de vos diciéndole “que casualmente le hablaba para saludarlo”. Su mejor amigo devolvió mi llamada por la noche y aun recuerdo sus horrorosas palabras, yo había pasado la más terrible y ansiosa semana de mi vida pensando e imaginando un millón de historias trágicas y mí querido novio se la había pasado de lo más bello y tranquilo en plena luna de miel de reconciliación con su ex novio…

Lloré, lloré y lloré tendido en mi cama toda la noche hasta quedarme dormido, y aun dormido seguía llorando… al día siguiente mis padres no pudieron hacerme ir al colegio, ni salir de mi habitación, mientras yo adentro no salía del terrible “shock” emocional, no lo creía, simplemente no lo creía, pensaba y pensaba, y trataba de recordar cualquier señal, cualquier detalle, pero no, no había ningún indicio que me hubiera alertado sobre que esa espantosa situación iba a ocurrir, reviví en mi cabeza cada momento que pasamos juntos durante toda nuestra relación, pero no encontraba nada, nada, nada solo veía su bella sonrisa cuando siempre se despedía de mi. Y ahí recordé esa terrible situación que nos ocurre cuando estamos enamorados, simplemente dejamos que nuestros ojos vean lo que nosotros queremos ver, no vemos la realidad, cosa que yo pensaba que vivía cada día, pero cada día solo vivía, sentía, veía, y escuchaba lo que yo quería.

Recuerdo que por semanas me encerraba en mi universo a escuchar música corta-venas, mientras tapaba todas ranuras por donde entraba la luz a escuras me ponía a recordar esos bellos momentos que yo había vivido, y que al final de todo eran míos esos momentos y nadie me los podía quitar, solo el olvido claro está. Otros días me torturaba viendo nuestras fotos, el cuales salíamos riendo y jugando entre nosotros, en nuestro mundo no existía nadie más que el puro amor que sentíamos. Yo las veía con una sonrisa fingida y una lágrima que me recorría las mejías hasta desaparecer en mi cuello y mi garganta se hacia un nudo tratando de evitar no caer en llanto. Un cigarro tras otro me ayudaba a controlar mi terrible ansiedad. Jamás en mi vida había experimentado en mi cuerpo el significado de eso que muchos llaman el mal de amores.